Escrito por Mónica
Hoy salimos un poco de la temática habitual del blog para contaros una receta súper súper fácil de galletas. Tan fácil que nos pueden ayudar los críos por muy peques que sean. Una idea más para disfrutar del tiempo libre en verano, algún día que nos toque quedarnos en casa.
Además siempre viene bien tener unas galletas caseras a mano. ¿Empezamos?
Necesitaremos: Azúcar, mantequilla, harina, levadura, leche (opcional), huevo (opcional). Horno, bandeja, papel de horno o silicona para horno (aunque para un apaño podemos utilizar papel de plata).
Para planificar el tiempo: Hacer la masa nos va a llevar unos 20 minutos, no más (con varillas manuales, si tenemos eléctricas menos tiempo, aunque yo prefiero las manuales). Después necesitaremos al menos una hora para que la masa repose en la nevera (el paso más complicado para la poca paciencia de los niños), unos 25 minutos más para hacer las formas (contando con que nos ayuden los niños, que siempre se entretienen más), y otros 15 minutos para hornear.
Los ingredientes que os dejo dan para hacer unas 30 galletas de tamaño mediano:
– 200 gr. de azúcar, 6 cucharadas de mantequilla bien colmadas, 1/3 de sobre de levadura, 300 gr de harina, 1 huevo y 1 tacita de leche (de las pequeñas de café). Si hay alérgicos a huevo y/o leche, estos dos ingredientes se pueden obviar y el resultado es similar.
Primero mezclaremos todo el azúcar con la mantequilla, ésta tiene que estar a temperatura ambiente. Si nos hemos olvidado de sacarla con tiempo, 10-20 segundos en el micro la dejarán lista.
Si queremos echar huevo, lo hacemos en este punto, y mezclamos.
Después vamos echando la harina poco a poco y la mezclamos con la mezcla anterior, cuando acabemos echamos la levadura. Añadimos la leche, esto suavizará un poco la mezcla.
Llegados a este punto, podemos seguir trabajando un poco la masa con las manos. Dejamos la bola hecha y la metemos a la nevera, mínimo una hora, para que esté bien firme y podamos hacer las formas con facilidad.
Pasado el tiempo, cogemos la masa y la preparamos con las formas de las galletas que elijamos. Dos caminos: usar moldes comprados o improvisar con manos y cuchillo. Estos son los pasos que más entretienen a los niños.
Si tenemos moldes, extendemos la masa con un rodillo de amasar y vamos haciendo los dibujos. Si no tenemos moldes, o no queremos usarlos, podemos hacerlo con la mano, como si fuera plastilina (imaginación al poder). Por ejemplo, para hacer «hamburguesas» como estas:
Después, vamos colocándolas en la bandeja y decoramos. Las últimas que hice pusimos lacasitos y trocitos de chocolate negro, pero se pueden decorar con cualquier cosa que nos apetezca: fideos de chocolate, frutos secos, etc
Después ya sólo nos queda el paso del horno. De 10 a 15 minutos a 180 grados. Y si os gustan muy tostadas y crujientes (como a mí), 5 minutos más con el grill a tope.
Sacar, enfriar y listas para comer. ¿Fácil, no?
Aquí está el resultado:
Marta
15 julio
Las veces que hemos hecho galletas…. Se nos han quemado, y han salido muy duras. Tenemos que volver a intentarlo. Me apunto ingredientes para comprarlos esta tarde.
Monica
15 julio
vigila no pasarte con el tiempo, si te gustan más blanditas. También puedes hacerlas más gorditas para que el centro quede más flojo. Depende mucho de gustos, ya nos contarás 🙂
Mariela Parma
15 diciembre
Super para realizar con los peques de la casa!!! saludosss