Escrito por Lis.

Coincidiendo con los Días del Padre y de la Madre, en este Trimestre nos centraremos en Desarrollo Infantil resumidos en una serie de entradas,  y hoy nos dedicamos este primer post a  los seis primeros meses de nuestros peques.

Nuestros hijos vienen al mundo y su primer gran cambio es la salida al exterior de la barrigota de su mamá, algo tan normal como eso, ya es un enfrentamiento al cambio, pasan  de un ambiente cálido y húmedo a otro absolutamente diferente en el que tienen que “valerse” por sí mismos, respirar, comer, adaptarse a los ruidos, la luz y soportar las diferentes texturas de esas preciosas sábanas, mantitas y todo tipo de artilugios que con tanto amor hemos comprado o hecho para ellos.

Los bebés tienen un largo camino para aprender

Por ese motivo necesitamos ser benevolentes  a la hora de valorar sus logros, hoy daremos algunas pautas del desarrollo entre los dos y los seis meses, pero tengamos en cuenta el respeto a las diferencias, no todos los bebés tienen que tener un desarrollo  similar en todos los aspectos como no todos los adultos reaccionamos con la misma rapidez ante situaciones vitales. Lo importante para las mamásy los papás es: ”Conocer  y  Actuar”. Actuar sin alarmas innecesarias y orientando la estimulación hacia aquellos aspectos que consideramos que son sus “puntos débiles” y si intuimos que algo no marcha bien en el desarrollo de nuestro bebé  debemos buscar ayuda profesional recordemos que la única manera que podemos asegurarnos de que no cambia una situación es no movilizándonos para cambiarla.

Así como el trabajo de un niño es el juego, el de un bebé es el descubrir e ir convirtiendo su comportamiento instintivo en un comportamiento más social.

Los indicadores del desarrollo son aquellas cosas que la mayoría de los niños pueden hacer a una edad determinada. Al finalizar el segundo mes de vida  justo antes de cumplir los tres meses un bebé ya puede mantener la cabeza alzada e intenta en ocasiones alzar el cuerpo cuando está boca abajo, también es capaz de mover brazos y piernas con mayor suavidad. En el área del habla y la comunicación comienza a emitir sonidos y gorjeos y busca los sonidos del exterior moviendo la cabeza.

Es ya en ese momento cuando empezamos a asombrarnos con sus primeros escarceos sociales y emocionales pues ya sonríen en ocasiones, comienza a calmarse sin ayuda en algunos momentos recurriendo a chuparse la mano o a ponerse los dedos en la boca y trata de mirar a sus padres.  En el área cognitiva o del aprendizaje empezamos a percibir como el pequeño/a poco a poco empieza a seguir las cosas con los ojos y reconoce a las personas a más distancia, se interesa en las cara y demuestra aburrimiento cuando no se cambia de actividad, lloriquea, gime, se inquieta.  Es este un estupendo momento para comenzar a utilizar hamacas de juego o en mantitas con colores y texturas para estimularles que poco  a poco vayan descubriendo y aprendan a la vez que se entretienen.

En estos períodos los bebes aprenden de forma vertiginosa por lo que hay ocasiones en las que se superponen unos logros con otros lo que esabsolutamente normal.  Justo antes de los cinco meses de vida  podemos ver que ya sonríe espontáneamente, le gusta jugar con otras personas e incluso puede llorar cuando el juego termina y comienza a copiar gestos como sonreír y fruncir el ceño. Ya es capaz de mantener la cabeza sin soporte, se empuja con las piernas cuando tiene los pies sobre una superficie firme y  se puede dar la vuelta cuando está boca abajo y quedar boca arriba. Se hace más claro el balbuceo y los sonidos que hace y comienza a llorar de diferentes maneras en un primer intento de mostrar sus estados de ánimo, el llanto puede variar de entonación e intensidad en dependencia de si tienen hambre, sueño o dolor. Es ahora cuando el bebé trata de alcanzar objetos con la mano, sigue con la vista las cosas que se mueven,  moviendo los ojos de lado a lado, comienza a coordinar de forma incipiente las manos y los ojos y observa con atención las caras conocidas.

Al cumplir los seis meses nuestros niños han hecho enormes progresos, en su desarrollo posterior  no existe ningún período en el que se den tantos  cambios y de una forma tan rápida. Una vez llegado este momento nuestro bebé reconoce caras familiares y reconoce cuando alguien es desconocido, disfruta de jugar con las personas especialmente con sus padres y se expresa emocionalmente, sonríe frecuentemente y le gusta mirarse al espejo. Observa atentamente a su alrededor, se lleva cosas a la boca, intenta coger objetos que están lejos de su alcance, y comienza a pasar las cosas de una mano a otra. En el plano de la comunicación copia sonidos, reproduce vocales como “a”, “e”, “o”, comienza a repetir “m” o la “b” y hace sonidos para demostrar alegría o tristeza.  Es en este momento en elque el niño es capaz de mantenerse sentado sin apoyo, se gira sin dificultad a ambos lados y se mece hacia delante y detrás y  puede hasta comenzar a gatear.

Todos estos indicadores son orientativos y probablemente si su bebé no los ha logrado en el momento en que se describen no exista ningún problema y solo necesite un poco más de tiempo, sin embargo  deberías consultar a un especialista si al cumplir los seis meses observas que tu bebé:

–          No reacciona ante sonidos de su alrededor.

–          No se ríe ni hace sonidos de placer.

–          Tiene dificultades para llevarse cosas a la boca.

–          No trata de agarrar objetos que están a su  alrededor.

–          Se ve rígido y con los músculos tensos.

–          No emite ningún sonido.

–          Se ve sin fuerzas como si sus músculos no le permitieran sostenerse.

–          No rueda en ninguna dirección para darse la vuelta.

–          No demuestra afecto por quienes le cuidan.

En el próximo post veremos cómo se desarrolla el bebé a partir de los 6 meses de edad.

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