Escrito por Mónica
Este fin de semana los chicos de la Granja-Escuela La Torre nos invitaron a pasar unas horas en la actividad para familias que organizan periodicamente. Lo pasamos en grande y volvimos encantados.
Es una de las actividades que tenía ganas de probar, porque para los niños es toda una experiencia y disfrutan enormemente. Tenía un poco de miedo porque pensaba que el mini aún es pequeño para disfrutarlo al 100 %, pero para nada, si tenéis niños de esta edad lo recomiendo totalmente.
En la granja escuela los peques pueden tener cerca animales que normalmente no ven en su día a día, además las monitoras les explican muy bien, y de forma adaptada a ellos cómo es la vida en la granja y curiosidades sobre los animales, desde los perros pastores a las vacas, pasando por pavos y gallinas.
Esta actividad suelen disfrutarla en las actividades de los coles y las guarderías, pero tener la oportunidad de ver sus caras y reacciones en directo es un lujo que no nos tenemos que perder.
Para ello, la granja escuela La Torre ofrece 6 findes al año, para compartir con otras familias estos momentos tan especiales, y poder ver juntos cómo esquilan a una oveja, y probar ellos mismos, o ver ordeñar a una cabra.
Los grupos son reducidos, así que todos los niños tienen su oportunidad de tocar y experimentar. La visita la llevan las monitoras y desde el primer momento se quedan con los pequeños.
Hice un montón de fotos, me hubiera gustado ponerlas todas, pero quizás sean demasiadas, así que aquí tenéis una selección que os mostrará cómo es una tarde en la granja escuela.
Primero tuvimos una parada con los conejos. Les pudieron dar de comer y tocarlos; el mini se soprendió mucho cuando tocó uno, por la cara que puso, creo que le pareció extraordinariamente suave. 🙂
En los corrales pudieron ver también a las gallinas, ocas, perdices y pavos, y con un vasito lleno de trigo vieron qué y cómo comían. Además pudimos observar huevos recién puestos.
En la granja no todo son animales, y tuvieron la suerte de comer granadas recien cogidas, vieron cómo son los caquis y de dónde salen y comprobaron que las higueras dan muchos higos.
Después de degustar una rica merienda con productos ecológicos, como quesos variados, zumos naturales, embutidos y fruta, los peques tuvieron un rato para jugar y correr en la pradera mientras los mayores nos tomábamos un café. (El mini volvió dentro a pedir más manzana, se puso las botas con la merienda)
Hasta los pájaros se tomaron su rato de relax. Después volvimos a los corrales, porque quedaban muchos animales por ver.
Los peques disfrutaron mucho con las cabras, que muy amigables, se dejaban tocar y observar.
Las cabras tenían hambre, y los críos, encantados. También había dos burritas:
Tuno, el gato, una de las estrellas de la visita. No torció el gesto ni cuando le persiguieron cinco peques para jugar con él.
Para los que estéis en Zaragoza y os apetezca una visita a la granja, podéis visitar su página de facebook para ver más info ( facebook.com/GranjaEscuelaLaTorre) . Este otoño aún queda una visita para familias, será el 9 de noviembre. Reservad plaza, que son limitadas, y de verdad que merece la pena.
Para los que estéis más lejos, lo dicho, una actividad muy recomendable para peques y grandes, y seguro que en vuestra zona podéis encontar alguna granja escuela para acudir.
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